Vivimos una época en la cual los cambios climáticos afectan al planeta entero, manifestándose en fenómenos naturales y poniendo en riesgo nuestro patrimonio.
Fenómenos naturales
La destrucción de ecosistemas y el medio ambiente ha propiciado sequías, huracanes e inundaciones en múltiples regiones del mundo.
Por lo que, desde el 2008, el número de desastres a causa del cambio climático no baja de 900 anualmente.
México es uno de los países en los cuales los fenómenos naturales se presentan con mayor frecuencia y diversidad.
Durante los últimos 2 meses, se han registrado altas temperaturas y fuertes lluvias en gran parte del país, desatando inundaciones y deslaves que ponen en riesgo las vidas de los ciudadanos.
La intensidad de las lluvias, sequías y granizo han golpeado diferentes zonas del país, trajo daños en la infraestructura de diferentes industrias, siendo el sector agrícola el más afectado.
Según cifras de AgroAsermex en 2013, 1.854 millones de pesos fueron destinados para subsanar los daños catastróficos que el campo mexicano sufrió por las tormentas ‘Íngrid’ y ‘Manuel’.
Protección confiable
Hoy día, las aseguradoras han ampliado sus coberturas con el fin de proteger los daños derivados por fenómenos naturales.
Contratar un seguro con cobertura para siniestros de esta clase, no es exclusivo de quienes viven en los litorales o rodeados de colinas.
Los torrenciales que también afectan al centro del país han provocado inundaciones y derribado árboles que podrían dañar edificios, autos y a las personas.
Aunque la información y recomendaciones respecto a adquirir un seguro contra desastres naturales es poca.
Las cifras de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), mostraron que las pólizas por daños agrícolas habían aumentado 16.5% en 2013.
A pesar de la existencia de métodos para prever un huracán o lluvia torrencial, no podemos conocer en qué medida estos podrán afectar la infraestructura o producción de tu industria.
En caso de ya contar con un seguro
Revisa la póliza y verificar los riesgos contra los que estás protegido. Si aún no cuentas con uno, te recomendamos lo siguiente:
- Si deseas adquirir un inmueble, toma en cuenta los factores de riesgo naturales de su localización.
Pueden ser como: cercanía a ríos, cerros, árboles cercanos, sistema de drenaje, entre otros.
- Al adquirir una póliza para tu patrimonio, asegúrate que tenga cobertura contra desastres naturales.
- No todos los siniestros son una posibilidad. Considera la zona geográfica donde te encuentras y con base en ello define los servicios de tu seguro.
Los productores agrícolas son los que más han mostrado interés por cuidar su infraestructura, inmuebles y cosechas, en caso de daños y pérdida total o parcial de sus bienes.
Sin embargo, es fundamental que todo empresario considere re valorar la cobertura de su seguro, sin importar el sector en el que se desarrolle.
No permitas que algún fenómeno natural ponga en riesgo parte importante de tu patrimonio.
Busca ayuda profesional para que te oriente y puedas elegir un seguro que se ajuste a tus intereses y necesidades.
Recuerda que prevenir es la mejor forma de cuidar tu inversión.
Fuente: Global Assurance